17/11/2023
La energía sostenible hace referencia a la producción y uso de energía de tal manera que se satisfagan las necesidades actuales sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones de satisfacer sus propias necesidades. En otras palabras, implica el desarrollo de fuentes de energía que son renovables, es decir, que no se agotan con su uso y que tienen un impacto ambiental mínimo. Se enfoca en el uso eficiente de los recursos naturales y promueve el desarrollo local. Por ejemplo, los paneles solares y las turbinas eólicas convierten la energía directamente de fuentes naturales, sin consumir recursos adicionales.
En los últimos años, la investigación y el desarrollo en el campo de la energía sostenible han dado lugar a avances tecnológicos significativos, haciendo que estas fuentes de energía sean más asequibles y accesibles. Gracias a ellas, los países pueden volverse más autosuficientes en términos de energía, reduciendo su dependencia de importaciones de combustibles fósiles y aumentando su seguridad energética. Además, tienen un impacto ambiental significativamente menor en comparación con los combustibles fósiles, así que reducen las emisiones de gases de efecto invernadero y disminuyen la contaminación del aire y del agua.
¿Por qué es necesaria la energía sostenible?
La energía sostenible es necesaria por varias razones fundamentales. La quema de combustibles fósiles para obtener energía es una de las principales causas del cambio climático. Las energías renovables como la solar, eólica e hidroeléctrica emiten significativamente menos gases de efecto invernadero, lo que ayuda a mitigar los efectos del cambio climático, como el aumento del nivel del mar o las inundaciones.
Además, la quema de combustibles fósiles emite contaminantes que afectan la calidad del aire y la salud de las personas. Las energías renovables no emiten contaminantes a la atmósfera, mejorando así la calidad del aire y reduciendo la incidencia de enfermedades respiratorias en la población.
Los combustibles fósiles son recursos finitos y no renovables, así que en algún momento se agotarán. Mientras, la energía sostenible proviene de fuentes renovables que son inagotables y disponibles en abundancia, lo que asegura un suministro continuo de energía a largo plazo.
La explotación de recursos naturales para obtener energía puede causar daños irreparables a los ecosistemas, lo que lleva a la pérdida de biodiversidad. Las energías renovables tienen un impacto ambiental mucho menor, lo que contribuye a la conservación de la biodiversidad y de los ecosistemas naturales.
Y, por último, cabe señalar que la transición hacia la energía sostenible fomenta la innovación tecnológica, lo que a su vez mejora la competitividad de los países en la economía global.
Retos a futuro de la energía sostenible
A pesar de los avances significativos que se están dando en la energía sostenible, todavía existen varios desafíos a futuro que se tienen que abordar para promover su adopción a gran escala y garantizar un suministro de energía seguro, asequible y sostenible para todos. Algunos de los retos a futuro más relevantes son:
- Almacenamiento de energía: algunas fuentes de energía renovable, como la eólica y la solar, no siempre están disponibles. Por este motivo, es necesario desarrollar tecnologías eficientes y económicas para su almacenamiento.
- Red eléctrica: integrar grandes cantidades de energía renovable en las redes eléctricas existentes plantea desafíos técnicos y de gestión. Se requieren mejoras en la infraestructura de la red y en las tecnologías de gestión de la demanda para facilitar una transición suave hacia fuentes de energía renovable.
- Conciencia social: la falta de conciencia social puede obstaculizar la adopción de la energía sostenible, razón por la cual la educación es clave para fomentar un cambio de actitud hacia ellas y promover su uso.
